El blanco jamás pasará de moda, al contrario, con cada año nuevo retoma fuerzas y llega con mucha energía en la decoración de interiores y exteriores. Para este 2018 la recámara será la habitación predilecta para esta tonalidad que es todo pulcritud y pasividad, y no hay estilo decorativo que se escape, tan es así que en este libro de ideas tenemos varios ejemplos, dos para ser exaltados, de como luce el blanco en recamaras de nueve distintos estilos.
Minimalista, rural, mediterráneo, moderno, ecléctico, escandinavo, asiático, rústico y tropical; de todas esas tendencias decorativas encontrarás inspiración. ¿Iniciamos?
Comencemos con un estilo que hace un equipo perfecto con lo blanco, nos referimos al minimalista.
Con una atmósfera y mobiliario netamente blanco, la recamara invita al
descanso y la tranquilidad sin olvidar la originalidad, que aquí se
conecta en el piso con una alfombra sintética que bien podría ser
catalogada pieza artística de lo linda o sofisticada que es.
De nueva cuenta el blanco está de inicio a fin, el único contraste o da un cuadro que denota pasividad por le motivo y ternura pro el color.
Otro estilo que va de maravilla con el blanco es el moderno. En este ejemplo no hubo temor al tener paredes, cabecera y ropa de cama de este color, pues ya se tenía considerado que cuando un tono neutral es protagonista, cualquier material al natural puede generar el contraste moderno y necesario. En cuanto a las lámparas de techo, éstas no podría ser más vanguardistas.
Si lo tuyo no son los contrates tan notables seguro esta recámara moderna te encantará, pues todo en ella es armonía, ¡hasta la luz es blanca!
El estilo de las combinaciones atrevidas es el ecléctico. Él también acepta al blanco, siempre y cuando quedé en la atmósfera (paredes y muebles grandes) pues requiere jugar con los detalles a find e que estos genera las inigualables mezclas de colores, formas, texturas, épocas, etcétera.
Blancura que de pronto se torna en una pieza de arte un tanto caótica en sensación y cálida en tono ¿Te gusta la idea?, es un manera de triunfar al tener blanco y estilo ecléctico en la recámara.
Para el estilo mediterráneo el acogimiento y la pasividad son de las sensaciones que más le importan, pro eso es común ver a la madera, ese material nos hace de inmediato sentir queridos y seguros. En cuanto a incluir el blanco, lo que pasa es que no hay color que vaya tan bien con la crudeza de la madera.
El estilo mediterráneo lleva su nombre de un zona geográfica con características en particular, así que le debe mucho a la naturaleza. Por esto siempre refleja si amor con la presencia de ella en la decoración, como aquí, donde toda la atmósfera blanca se nutre de maravilla con el toque que dan los guijarros en la pared lateral.
Blanco por excelencia y utilizar materiales naturales, principales caracerísticas de este estilo. La clave: crear un ambiente acogedor con pocos elementos.
Ahora bien, si te gusta el escandinavo pero no quieres todo blanco, puedes incluir tonos terra, siempre y cuando sean sutiles y se ubiquen en las áreas que mayor uso tienen, pues el blanco, pro el uso, siempre tiende a deteriorarse más rápido.
Para el estilo asiático lo que importa es generar un lugar para la tranquilidad y meditación. así que mientras toda la recámara denote pasividad con el blanco, y sólo tenga destellos de colores alegres y con vibra positiva, la decoración está completa.
Si lo que buscas es todavía más tranquilidad, sigue con el estilo asiático con el tono blanco como clave, sólo envuelve tu cama en telares para que la intimidad sea mayor.
El colorido de lo rural no está peleado con recámara blancas, al contrario, las ve como el lienzo perfecto para destacar alguna pieza divertida y llena de energía.
De hecho, para el estilo rural las habitaciones blancas son un magnifico lugar para colocar cualquier otro color y generar un juego interesante, no sólo para denotar tradición sino mucha personalidad, aquí por ejemplo, bastante feminidad.
Con muebles robustos, de formas burdas pero bellas y que denotan un arduo trabajo, está recámara nos demuestra que los rústico también ama al color blanco, pues lo hace ver tradicional sin llegar a lo agresivo y burdo.
Además de lo mencionado en el punto anterior, el estilo rústico no busca ser protagonista, con detalles plagados de tradición dentro de una atmósfera pura y clara se puede mostrar a plenitud.
Para el estilo tropical todo gira en la frescura, ¡imagina que tanto le conviene tener una recámara mayormente teñida de blanco!
Como si de un hotel a unos pasos de la playa, esta recámara nos hace recordar que el frescor y la pasividad es algo que nuca puede faltar en una recámara tropical, por suerte el color blanco tiene estas dos cualidades como características.